Una persona que no puede estar sola, sólo puede estar con los demás a medias.
Sergio García

Las personas que sufren de dependencia emocional van a describir cómo sus emociones están a expensas de otra persona (pareja, familiar, etc.) de una forma desmesurada.

La persona con dependencia siente que necesita a esa persona. No es una necesidad real, pero la persona sí la vive como tal. Estas personas viven con un gran sufrimiento provocado por sus excesos de control, miedos irracionales, ansiedad y baja autoestima, 

De hecho, la autoestima y la dependencia emocional están íntimamente relacionadas entre sí y, además, se retroalimentan la una a la otra. Tener una fuerte autoestima puede funcionar como factor de protección contra la dependencia emocional.

Es importante acudir a terapia si detectas que eres una persona dependiente emocionalmente. Una persona que se muestra necesitada, va a traspasar todos los límites existentes y terminará aceptando situaciones que no son de su agrado con tal de complacer a la otra persona, lo que puede acabar generando relaciones muy tóxicas, ya sean en el ámbito familiar, de pareja o social.